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Las mujeres en la prehistoria

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  • La exposición ha viajado por toda España desde su inauguración en 2006
  • Las mujeres de hace 80.000 años también cazaban, pescaban, o recolectaban, entre otras tareas

«Desde el siglo XIX, la investigación desarrollada en Europa sobre la prehistoria ha proporcionado un conocimiento exhaustivo de los modos de vida de las sociedades del pasado. Sin embargo, es fácil comprobar cómo la presencia de la mujer en la mayor parte de los textos y de las imágenes de exposiciones divulgativas es casi nula, apareciendo siempre el hombre prehistórico, el neutro masculino”, explica Begoña Soler, comisaria de la exposición.

La localidad valenciana de Almussafes exhibe hasta el próximo 4 de enero Las Mujeres en la prehistoria, la muestra itinerante producida por el Museo de Prehistoria de Valencia que, desde 2006, ya ha visitado cerca de 36 museos de la provincia y seguirá su exitoso periplo en 2014.

Esta exposición itinerante tiene como objetivo exponer el rol de las mujeres neardentales El discurso expositivo se inscribe dentro de la llamada «arqueología de género», una disciplina surgida al calor de los movimientos feministas de los años sesenta del pasado siglo.

La exposición Mujeres en la Prehistoria / Foto: Diputación de Valencia

La exposición Mujeres en la Prehistoria / Foto: Diputación de Valencia

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La exposición

La participación de la mujer en la sociedad prehistórica se muestra a través de seis bloques temáticos: Cazar, recolectar, sobrevivir; Espacios domésticos, espacios de mujeres; La imagen de la mujer; Reproducción y socialización; Mujeres enterradas y Mujeres de hoy, sociedades del pasado. A través de estas áreas se recorren todos y cada uno de los aspectos de la vida y muerte de la mujer en la prehistoria.

big_Portada_Mujeres (1)Cazar, recolectar, sobrevivir trata de rebatir la asociación que se ha hecho históricamente de la mujer al espacio de hábitat, a la preparación de los recursos y al procesado de los alimentos: raspar la piel, elaborar prendas de vestir, hervir, asar, ahumar… En este espacio se evidencia que, además de todo esto, como el resto de los miembros del grupo, hace 80.000 años las mujeres de poblados se ocuparían de conseguir parte de los recursos cazando, pescando, recolectando y aportando agua y leña, entre otras tareas.

Espacios domésticos, espacios de mujeres muestra como en el ámbito doméstico, reconocido como un espacio en el que las mujeres realizan parte de su trabajo, además de las actividades de mantenimiento, las mujeres también participaron en la fabricación de la cerámica y el proceso fundición y refinamiento del metal.

En La imagen de la mujer se refleja cómo representaban la figura femenina en el Paleolítico y en el Neolítico y en Reproducción y socialización se muestra cómo las mujeres son indispensables para la supervivencia del grupo, el cuidado, el mantenimiento y la transmisión de valores y conocimientos.

En Mujeres enterradas se realiza la interpretación de restos de mujeres encontrados en las excavaciones arqueológicas y su asociación a objetos ligados históricamente.

Finalmente, Mujeres de hoy, sociedades del pasado ofrece un análisis de las sociedades prehistóricas a través de la investigación antropológica o etnoarqueología.

Detalle de la muestra / Foto: Diputación de Valencia

Detalle de la muestra / Foto: Diputación de Valencia

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Origen del análisis

La única metodología posible es el análisis del registro arqueológico, es decir, de los objetos heredados de esas sociedades y de los contextos en los que aparecen. Soler relata que utilizaron la información recabada en distintos yacimientos como el del Cerro de la Encina, en la localidad granadina de Monachil; la Motilla del Azuer, en Daimiel; Peñalosa, en la localidad jiennense de Baños de la Encina o Castellón Alto, en la localidad de Galera, Granada.

A lo que hay que añadir los estudios paleopatológicos y antropológicos, es decir, los restos óseos de los individuos de estas sociedades. Por ejemplo, en lo que se refiere a la Edad del Bronce, se sabe que los hombres encontrados en esas excavaciones muestran un mayor desarrollo muscular en la parte inferior del cuerpo, probablemente debido a que recorrían largas distancias. Sin embargo, las mujeres hacían un esfuerzo mayor con la parte superior, debido a actividades como la molienda del cereal o el acarreo de objetos. Estas diferencias fisiológicas pueden darnos pistas sobre los distintos trabajos que desempeñaba cada sexo.

Según Margarita Sánchez Romero, investigadora del departamento de Prehistoria y Arqueología de la Universidad de Granada: «Las mujeres son las grandes olvidadas de las sociedades prehistóricas». Cuando alguien piensa en el ser humano prehistórico se imagina un hombre alto y corpulento. No obstante, sectores sociales tan importantes como las mujeres han quedado relegados por la historia y por la visión actual de esa época.

«Tenemos la visión de que el individuo-tipo de esa época es un adulto masculino, prácticamente occidental, y nos olvidamos del resto de miembros del grupo: individuos infantiles, mujeres e individuos de edad avanzada. No considerar las actividades que realizan o su importancia social supone un déficit para la disciplina arqueológica y para las interpretaciones que hacemos de las sociedades del pasado», matiza la investigadora.

Detalle de la exposición / Foto: Diputación de Valencia

Detalle de la exposición / Foto: Diputación de Valencia

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Tras su inauguración hace siete años, la muestra también ha recorrido gran parte del territorio español y ha estado en lugares como el Parque de las Ciencias y la Universidad de Granada, el Museu Nacional Arqueològic de Tarragona, la Sala de Exposiciones de la Facultad de Humanidades del Campus de Esteiro de Ferrol, el Museo Arqueológico Provincial de Badajoz, el Palacete del Embarcadero de Santander y el Museo Arqueológico de Guadalajara.

Julià Pérez // Valencia

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